Tortuga considerada extinta vive en Nicaragua
Seis de las siete tortugas migratorias que existen en el mundo llegan a las costas nicaragüenses, principalmente la variedad conocida como Paslama.
Una de las especies de tortuga que se creía extinta a nivel mundial es la Carey del Pacífico Oriental. Se consideraba esto porque no se notaba su presencia en países donde antes estuvo. Pero en el Estero Padre Ramos, en Chinandega, un grupo de investigadores encontró que este animal sí existe y anida entre sus manglares.
Verónica Cáceres, secretaria ejecutiva de la Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas, asegura que “Nicaragua es uno de los cuatro países donde están llegando a anidar las tortugas Carey del Pacífico Oriental. Esto es una joya porque estamos contribuyendo a recuperar una población que se suponía extinta”.
Esta especialista nicaragüense trabaja desde Estados Unidos con 15 países más que procuran la conservación de las tortugas marinas. “Las tortugas son animales emblemáticos. Nosotros debemos estar orgullosos que tenemos nuestras propias playas de anidación y también una gran cantidad de arribo de tortugas, como la Paslama”, dice.
Añade que “tener el Refugio de Vida Silvestre La Flor y playa Chacocente es una carta de presentación ante el mundo.
Tener estas playas de anidación en Nicaragua es algo casi único, porque son pocos los países en donde ocurre este fenómeno”.
Noel Sampson, miembro de Journey Nicaragua, una organización que desde el 2014 ha liberado a más de 3,000 mil tortugas marinas, manifiesta que para la conservación de estas especies “lo más importante es trabajar en la concientización de la comunidad, sobre todo de las nuevas generaciones”.
A criterio de la bióloga Verónica Cáceres, “se debe trabajar en los lugares donde todavía existe el consumo, se debe trabajar en la concientización de la población y crear conciencia en las nuevas generaciones para tratar de eliminar esta práctica destructiva que es en detrimento de la conservación de estas especies. La educación ambiental es importante”.
Cortesía: El Nuevo Diario