15 de Octubre de 1891.
Luego que un grupo de pobladores lo venían pidiendo desde 1887.
Sin embargo, hubo que esperar hasta el 15 de octubre de 1891 para que el entonces Presidente de la República, don Roberto Sacasa y Sarria, firmara el documento de la creación de este departamento.
El libro de actas municipales, aunque no especificó la fecha exacta —es decir, mes, hora y día, solo el año— recoge la petición en Cabildo Abierto y sesión extraordinaria en que el grupo de jinoteganos solicitaba la creación del departamento, que hasta entonces formaba parte de Matagalpa.
Firmaron esa petición los siguientes ciudadanos: Perfecto Lanzas, alcalde primero; Francisco Montenegro, alcalde segundo; los regidores, Sótero Palacios, Francisco Pineda y Ramón García; el juez de Agricultura, don Manuel Morales; el síndico, don Miguel Rivera y 52 ciudadanos de más de doscientos que asistieron a aquel Cabildo Abierto, recogió don Simeón Jarquín en su libro Jinotega: Recopilación histórica.
En la petición al supremo Congreso de la República de entonces, según el libro de Jarquín, se solicitó “la elección de un nuevo departamento, compuesto por la ciudad de Jinotega y los siguientes pueblos: San Rafael del Norte, La Concordia — dos de los 8 municipios actuales de Jinotega— más las villas de Estelí, La Trinidad y San Isidro o formar El Distrito Judicial, con los mismos anexos antes mencionados”.
Además de las autoridades municipales de entonces, firmaron la petición al Congreso de la República el general Patricio Centeno, héroe de la Batalla de San Jacinto; el alcalde indígena de entonces, don Jesús Rodríguez; el presbítero, J. Ramón Pineda, más otra serie de personalidades de aquella Jinotega.
Correspondió, según el libro de Jarquín, a los senadores de Matagalpa de la comprensión electoral de Jinotega, doctor Francisco López Guerra y el general Ignacio Chávez, presentar y obtener del Congreso la aprobación del proyecto de ley para la creación del departamento de Jinotega, el día 13 de octubre de 1891, dispensándoles la Cámara del Senado los trámites de reglamento, siendo el primer secretario de la misma el doctor Francisco López Guerra.
¿DE DÓNDE VIENE EL NOMBRE DE JINOTEGA?
Lingüísticamente, varios investigadores, entre ellos Alfonso Valle, sostienen que el nombre de Jinotega se deriva de las voces mexicanas, de origen nahualt o chorotega, “xilolt”, contracción de “xinocualitl”, que significa, jiñocuao y “tecaltl”, gente, persona o habitante; traduciéndose el nombre del departamento de Jinotega como habitantes de la región de jiñocuaos.
El lingüista salvadoreño profesor Fidias Jiménez, quien es de los pocos centroamericanos que habla correctamente el nahualt, nahua o nahoa mexicano (según el libro de Jarquín) acepta la traducción anterior y sostiene que también las derivaciones del nahuatl anteriores significan Ciudad Eterna o Ciudad de los Hombres Eternos.
Sobre dónde estuvo asentada la Ciudad Eterna, aunque no hay un documento histórico que así lo certifique, se cree fue el valle de Jocomico.
Según una carta conocida el 9 de noviembre de 1959, se afirma que en el Real Archivo de Valladolid, España, se encuentran datos del año 1561, fecha en que habría llegado a Jinotega el fraile dominico Pedro José de Jesús de Olid, quien sostuvo que la posición geográfica de Jinotega es el actual valle de Jocomico.
Jinotega cuenta actualmente con ocho municipios y está ubicada en la zona norte-central del país, a 168 kilómetros de la Managua. Se destaca por su alto potencial productivo del café y cultivo agrícola de maíz, frijol y hortalizas.
Se distingue de los demás departamentos del país por poseer un clima agradable y variado, y por poseer una de las reservas forestales más importantes de Centroamérica: Bosawás, ubicada al centro de las montañas del municipio de Bocay, cuya reserva está siendo invadida por colonos.
REFERENCIAS:
- (La Prensa)
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