1875. Alejandro Vega Matus. Natalicio

    Alejandro Vega Matus
    When:
    August 17, 2016 all-day America/Anchorage Timezone
    2016-08-17T00:00:00-06:00
    2016-08-18T00:00:00-06:00

    17 de Agosto de 1875.

    Alejandro Vega Matus (Masaya, Nicaragua, 17 de agosto de 1875 – 26 de noviembre de 1937, Masaya, Nicaragua).
    Fue un músico, compositor y director de orquesta nicaragüense.

    Es reconocido como pionero de la identidad musical de Nicaragua por ser el autor nacional del primer Son nica.


     

    Alejandro Vega Matus nació en Masaya, en la mañana del 17 de agosto de 1875, hijo de don Pablo Vega Ráudez y doña Chepita Matus. El sitio donde nació es hoy exactamente del edificio central de Telcor, una cuadra abajo y media al sur, donde hay una gran tapia que resguarda el solar en donde un tiempo fue la casa de nacimiento del músico, hasta su destrucción. Una solitaria placa de bronce indica al transeúnte que allí fue donde Alejandro nació y llenó de gloria a Masaya en el arte musical.

    Su padre, don Pablo Vega, era un músico consagrado, compositor y poeta. Su madre, doña Josefa Matus, era hermana de Cándida Rosa Matus, una devota mujer dada a escribir versos. Fue ella quien realmente crió a Alejandro desde los 4 años; al fallecer doña Josefa, su hermana y madre del futuro músico le enseñó sus primeras letras. Prácticamente Vega matus fue un hijo de tíos, o sea, criado por sus tíos, ya que tras la muerte de su madre su padre contrajo matrimonio con una joven leonesa y se trasladó a vivir a León y dejó al niño Alejandro al cuidado de doña Cándida.

    Sus primeros pasos

    En esta etapa Vega Matus visitaba mucho la casa de su tío José del Carmen Vega Ráudez, violinista de reconocida fama, en donde recibió sus primeras lecciones de música y aprendió a ejecutar instrumentos de cuerda (contrabajo, violoncello, guitarra) y de viento (cornos, trompetas, oboe, fagot y cornetín). También recibía clases de música de manera formal en la escuela de la señorita Amelia Ruiz Alvarado, en donde perfeccionaba sus conocimientos básicos y logró alcanzar un buen adelanto. Tal vez por agradecimiento a ello, Vega Matus compuso a sus tempranos nueve años una pequeña obra con estilo de mazurca que llamó “Amando Amelia”.

    Su padre lo llamó en 1886 a vivir a su lado en León y de él recibió también lecciones de música. Retornó a Masaya siete años después, a vivir esta vez con su tío José del Carmen y a ahondar sus conocimientos. Uno de sus pasatiempos favoritos era tocar el piano y el cornetín al mismo tiempo. Con la derecha ejecutaba el cornetín y con la izquierda se acompañaba al piano. Fue tal su fama en este acto que fue llamado para actuar en Guatemala, país en donde vivió un tiempo.

    Su primera orquesta

    Vuelto a su ciudad natal, a fines de 1893 formó su propia orquesta con algunos amigos músicos. Nació entonces la Orquesta Vega Matus, que luego tendría en sus filas a músicos reconocidos no sólo de Masaya, sino de todo el país y era catalogada entre las mejores que habían. Es entonces que Alejandro empieza a componer no sólo música ligera, sino que también seria o sinfónica. Aquí surge la “Obertura Luciana”, dedicada a su esposa Luciana Jiménez, y también “Noche de Navidad”.

    A comienzos del presente siglo compuso su primer oratorio sagrado que tituló “En la muerte de Jesús”, una de las obras más sublimes del maestro. Había también tiempo para la música “mundana” y así surge la gavota “Murió de un beso”, una de las piezas más populares de su variada obra. Pero quizá la más popular sinfonía de Vega Matus fue “La agonía del crepúsculo”, cuya parte más conocida estaba escrita para un cuarteto de cámara.

    La música “sacra” fue abundante en la obra de Alejandro y destacan dos “misas”: la de “Gloria” y el “Réquiem”. Compuso muchos villancicos navideños, avemarías, responsos, marchas fúnebres para procesiones, militares y para época de Semana Santa. Muchas de éstas todavía pueden ser escuchadas en la Parroquia La Asunción en ocasiones especiales, o en procesiones varias en las calles.

    Sus piezas bailables son también muchísimas. Entre sus famosos valses sobresalen “Filomena”, “Cascada de perlas” y “Margarita de las Margaritas”. Vega Matus exploró también ritmos norteamericanos en boga como el Cakewalk, One-step y el Fox- trot. Pero también sus “Danzas” como “La Mama Ramona” y “El Jaleo” son muestras de su versatilidad, unidas a los Pasodobles, los Sones de Pascuas y los Sones de Toros o de Cachos, tan ejecutados en nuestras barreras de toros locales.

    Su última composición, ya en su lecho de muerte, fue “María Argentina”, dedicada a la hija de su amigo Augusto Cermeño. Alejandro Vega Matus se rindió ante la muerte el 26 de noviembre de 1937. Masaya entera sintió su muerte y lo guarda como uno de sus hijos predilectos.

     

    REFERENCIAS:

    1. Alejandro Vega Matus (Wikipedia)
    2. Alejandro Vega Matus – 19/Agosto/1999 (El Nuevo Diario)

     

     

    Suscríbase a Nuestro Boletín

    Boletín de Información General de Nicaragua y los Nicas En El Exterior.

    GRACIAS por Subscribirse!

     

     

    11,171 total views, 1 views today

    COMENTARIOS

    Escriba sus Comentarios