¿Por qué las mujeres viven más que los hombres?
Los médicos e investigadores dicen que nunca es demasiado tarde para intentar añadir más años a tu vida.
Si eres un hombre y estás leyendo esto, se espera que mueras varios años antes que una mujer.
Puede que eso no te sorprenda mucho. Después de todo, históricamente las mujeres han vivido más tiempo que los hombres, algo que es cierto en casi todos los lugares del mundo. Pero en los últimos años, la brecha de longevidad entre los sexos solo ha crecido.
Datos publicados en la revista JAMA Internal Medicine en el 2023 encontraron que en el 2021, se esperaba que las mujeres vivieran casi seis años más que los hombres en Estados Unidos, la mayor brecha en la expectativa de vida entre los sexos en casi tres décadas. En el 2022, la diferencia se redujo un poco. Aun así, la expectativa de vida de una mujer en Estados Unidos fue de 80.2 años; para los hombres, fue 74.8, según muestran los últimos datos federales.
¿A qué se debe?
Los médicos e investigadores señalan varias razones por las que las mujeres generalmente viven más que los hombres.
5 razones por las que las mujeres tienden a vivir más tiempo
- COVID-19
El coronavirus es en parte culpable del reciente crecimiento de la brecha, dice el Dr. Brandon Yan, médico de la Universidad de California en San Francisco e investigador principal del artículo de JAMA. Los hombres tienen más probabilidades de padecer enfermedades crónicas, como diabetes o EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), lo que aumenta las probabilidades de sufrir una infección grave. También enfrentan normas sociales de masculinidad que pueden haber contribuido a la resistencia de usar mascarilla y vacunarse durante el auge de la pandemia, añade Yan
Yan sigue “cautelosamente optimista” de que la brecha comenzará a reducirse ahora que estamos en un mejor lugar con la COVID-19. El virus todavía está circulando, pero la mayoría de las personas tienen algún tipo de inmunidad a través de vacunas e infecciones previas, y los tratamientos pueden frenar complicaciones graves si se contrae. Aun así, que la COVID disminuya no significa que las vulnerabilidades de un hombre desaparecerán por completo.
- Diferencias biológicas
El estrógeno, cuyos niveles caen precipitadamente durante la menopausia, es una hormona que protege la salud, dice Dawn Carr, directora del Centro Claude Pepper de la Universidad Estatal de Florida y profesora afiliada al Institute for Successful Longevity.
Según Cleveland Clinic, el estrógeno puede ayudar a proteger el corazón y el cerebro, y puede reducir la inflamación y mejorar la masa muscular y la densidad ósea. De hecho, se cree que el estrógeno es la razón por la que las mujeres padecen enfermedad cardíaca —la principal causa de muerte en el país— una década más tarde que los hombres.
- Manejo del estrés
Hay una gran diferencia entre los hombres y las mujeres en términos de cómo procesan el estrés, dice Carr: “Cuando están estresados, los hombres tienden a adoptar comportamientos que tienen más consecuencias para su salud que las mujeres. Podrían beber alcohol y fumar. Y muchas veces no tienen las mismas redes sociales que los protejan para hablar de sus sentimientos y manejar sus emociones”.
Las mujeres, por otro lado, podrían ser más propensas a acudir a un amigo o familiar para hablar sobre lo que están pasando, una costumbre que sin duda es más saludable y reduce enormemente el estrés.
- Atención médica
Desde la juventud hasta la mediana edad, las mujeres tienden a visitar al médico más a menudo que los hombres, según los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Sin embargo, cuando llegan a los 65 años, más de 9 de cada 10 hombres y mujeres visitan a un profesional médico.
“Las mujeres suelen ser un poco más proactivas con respecto a su salud”, dice el Dr. Douglas E. Vaughan, director del Potocsnak Longevity Institute en la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern. “Lo vemos en la vida cotidiana y en nuestras prácticas aquí. Muchas de las medidas preventivas que las personas pueden tomar incluyen la detección del cáncer cervical o una mamografía, que están integradas en la cultura para que las mujeres las realicen. Los hombres pueden ser más reacios a aprovechar las oportunidades de detección que existen”.
- Educación universitaria
También hay una brecha en la educación universitaria: las mujeres superan a los hombres. Eso puede hacer que los hombres realicen trabajos más físicamente exigentes o riesgosos, dice Carr. El nivel de educación también puede influir en el acceso de una persona a una atención médica de calidad a lo largo de su carrera. En el 2021, el 46% de las mujeres de 25 a 34 años tenían una licenciatura, en comparación con el 36% de los hombres en ese rango de edad, según muestra un informe del Pew Research Center.
Cortesía: AARP. (síntesis)
Colaboración: www.Motivacion.info