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DEMOCRACIA

La palabra “democracia” tiene sus raíces en el griego antiguo. Proviene de la combinación de dos términos griegos: “demos”, que significa “pueblo”, y “kratos”, que significa “poder” o “gobierno”. Por lo tanto, la palabra “democracia” se traduce literalmente como “gobierno del pueblo” o “poder del pueblo”.

El concepto de democracia como sistema de gobierno se originó en la antigua Grecia, particularmente en Atenas durante el siglo V a.C. Se atribuye al líder ateniense Clístenes la introducción de reformas que permitieron una mayor participación de los ciudadanos en la toma de decisiones políticas. Atenas se convirtió en un ejemplo temprano de democracia directa, donde los ciudadanos tenían la oportunidad de votar directamente sobre cuestiones importantes.

A lo largo de la historia, el concepto de democracia ha evolucionado y ha sido reinterpretado en diversas formas, pero su origen etimológico sigue siendo fundamental para comprender su significado: un sistema de gobierno en el cual el poder emana del pueblo.

Entonces, ¿Qué es la democracia?

La democracia es un sistema de gobierno en el cual el poder político es ejercido por el pueblo, ya sea directamente o a través de representantes elegidos. En una democracia, los ciudadanos tienen el derecho de participar en la toma de decisiones sobre asuntos políticos, sociales y económicos que afectan a la sociedad.

Desde antes de la Guerra Civil salvadoreña, que tuvo lugar entre 1980 y 1992, el pueblo salvadoreño no tenía Democracia. Después de los disque “acuerdo de paz” que puso fin a la guerra civil, no fue lo suficientemente sólido, para mantener una verdadera paz duradera.

Las Pandillas

La deportación desde Estados Unidos de algunos de estos individuos a El Salvador, a partir de la década de 1990, llevó consigo la influencia y la estructura de las pandillas.

Es importante señalar que el fenómeno de las pandillas es multifacético y tiene raíces en factores sociales, económicos y políticos, así como en la historia del conflicto armado en El Salvador.

Derechos Humanos

Si desde hace más de 40 años el pueblo salvadoreño había estado sufriendo los embates de una guerra civil y la criminalidad de las pandillas, donde el derecho humano del pueblo salvadoreño honrado y trabajador se les había negado, sin ningún tipo de libertad, ya que estaban sometidos desde la década de 1990 a sobrevivir en zozobra. Los gobiernos en esa época fueron cómplices de esas actividades criminales como extorsión, tráfico de drogas, violencia y muerte, y tuvieron un impacto significativo en la seguridad y la estabilidad en El Salvador y otros países de la región.

Sin embargo muchos “gobiernos amigos” y organizaciones, aplaudían la “Democracia” que estaba viviendo El Salvador. Y desde 2019 que el “pueblo salvadoreño” tomó el “poder” con sus votos y eligió a un gobernante que si realmente se preocupa por ellos, no sólo en palabras, sino en “ACCIONES”, que ha logrado recuperar la paz y seguridad de todo el país.

No ha sido fácil lograr esa seguridad. Ya lo dijo Hipócrates: A grandes males, grandes soluciones. O sea, Ante un problema grave, no hay que temer recurrir a medios enérgicos para encontrar la solución. Y el presidente Bukele, con todo su entorno de valientes patriotas de la fuerza militar, policial, funcionarios gubernamentales y el “pueblo”, se enfrentaron con valentía a lograr que en El Salvador se viva en una Democracia de verdad.

Hipocresía Humana

El pueblo se ha sacrificado y aceptado rotundamente a vivir bajo el “Régimen de Excepción”, el tiempo que sea necesario, para mantener esa paz y seguridad que se requiere para vivir en Democracia. Pero, Sí, siempre hay un pero. Ciertos países, organizaciones y hasta medios de comunicación impresos y digitales, alzan su voz preocupados por dicha ley y los pandilleros, cuando en más de 40 años, cuando el “verdadero pueblo” sufría, ni pío dijeron.

Cuando el pueblo vivía un infierno, no había ONU, OEA, ONGs, ni organismo que exigiera a los presidentes en turno, seguridad y respeto por la vida de millones de inocentes, y ahora se preocupan por la población criminal del país. Una total hipocresía.

En síntesis, el pasado 4 de Febrero, el “pueblo salvadoreño” tomó el “poder” en sus manos, al elegir en completa paz, tranquilidad y seguridad, a su próximo presidente y diputados de su Asamblea Legislativa. Eso se llama “Democracia”, donde ha habido participación ciudadana, igualdad de derecho a participar, al lograrse por primera vez en la historia del país, que los salvadoreños en el exterior pudieran votar, unos 741,094 estaban posibilitados según el Tribunal Supremo Electoral. Habiendo también pluralismo, al haber participación y competencia entre los seis partidos políticos.

Existen varias formas de democracia, pero los principios fundamentales incluyen:

• Participación Ciudadana: Los ciudadanos tienen la oportunidad de participar en la toma de decisiones, ya sea a través de votaciones directas o eligiendo representantes para que tomen decisiones en su nombre.
• Igualdad: Todos los ciudadanos tienen derechos iguales y deben ser tratados con igualdad ante la ley. Ningún individuo o grupo debe tener privilegios especiales.
• Estado de Derecho: La democracia implica el respeto por el estado de derecho, lo que significa que las leyes se aplican de manera justa y equitativa, y nadie está por encima de la ley.
• Pluralismo: Se valora la diversidad de opiniones y se fomenta el debate abierto y la competencia política.
• Protección de los Derechos Humanos: La democracia busca proteger los derechos humanos fundamentales, como la libertad de expresión, la libertad de asociación y la libertad de prensa.

NOTA: Por favor, le pido a ciertos opositores de la dictadura genocida de Nicaragua, no ensucien el nombre del presidente Nayib Bukele y El Salvador, buscando similitudes y comparándolo con el gobierno nefasto de los Ortega-Murillo, que en lo absoluto se pueden comparar.

“El pueblo nicaragüense no vive en Democracia”.

“EL PUEBLO SALVADOREÑO SI VIVE EN DEMOCRACIA”.

Allan Ortegaray
Editor General / Vice Presidente
EditorGeneral@NicasNews.com

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